Marquetería para principiantes
Con SanFoot Unique, tiene la opción de imprimir digitalmente su diseño original o crear incrustaciones cortadas con láser en la propia madera. Sus diseños pueden aplicarse a una sola hoja o extenderse por varias hojas con un solo color o un proceso de 4 colores, lo que proporciona al diseñador un lienzo prácticamente ilimitado para su diseño. Las incrustaciones y la impresión digital aumentan la oportunidad de añadir elementos únicos a cualquier diseño.
Las incrustaciones personalizadas ofrecen una alternativa que ahorra trabajo en lugar de la laboriosa colocación de chapas. Las incrustaciones pueden crearse para representar diseños recurrentes, identidad corporativa y configuraciones para aplicaciones de tableros de mesa y gabinetes coordinados por el diseñador. Las incrustaciones personalizadas SanFoot preacabadas pueden producirse para paredes y techos, mientras que las incrustaciones SanPly pueden fabricarse para armarios personalizados, muebles y productos de consumo.
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Diseños de marquetería
Habilidades de la tienda: No hay mejor manera de añadir estilo y originalidad a un mueble que con la marquetería. Esta artesanía existe desde hace miles de años, así que quizá sea hora de que la pruebe.
El uso de la marquetería para adornar los muebles comenzó en Asia Menor, pero cobró nueva vida en Europa durante el siglo XV. Era cosa de la realeza y la iglesia, ya que eran los únicos que podían permitírselo. Entonces impresionaba a los invitados y a la familia de los líderes políticos y religiosos, y no hay ninguna razón por la que no puedas utilizar algunas de estas técnicas para impresionar a tus amigos y familiares hoy en día. Aunque puede resultar complicado al principio, con un poco de práctica no supera el nivel de habilidad de la mayoría de los carpinteros. Tómatelo con calma y empieza con algo sencillo; te sorprenderá lo mucho que la marquetería puede aportar a tu próximo proyecto.
La marquetería es el corte y ensamblaje de diferentes piezas de chapa de madera en una hoja que puede ser prensada en un núcleo. En general, hay dos formas de producir marquetería: con un cuchillo o con una sierra de calar. Aquí me centraré únicamente en la cuchilla. Aunque hay diferentes maneras de producir marquetería con un cuchillo, voy a ceñirme a la técnica específica que utilizo para la mayoría de mis trabajos de marquetería. Me parece que es bastante sencilla, no requiere ninguna herramienta sofisticada y puede dar resultados sorprendentes, rápidamente. El cuchillo funciona mejor para las chapas regulares o finas, así como para las maderas de grano recto. También es ideal para cortar líneas rectas. Una de las razones más importantes para utilizar un cuchillo es que es más fácil de controlar que una sierra de calar. Además, probablemente ya tenga un cuchillo en el taller con el que pueda experimentar. Sólo tienes que asegurarte de que está afilado.
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Las técnicas de la marquetería y la parquetería se remontan al menos a las civilizaciones clásicas, con el uso de estas técnicas evidente en las obras encontradas en las antiguas ruinas romanas de Pompeya y Herculano.
Tras un declive en su uso durante la Edad Media, la marquetería y la parquetería resurgieron durante el siglo XVI en Italia y se hicieron excepcionalmente populares en toda Europa durante la primera época moderna. Desde entonces han florecido en el diseño de muebles e interiores.
La producción de trabajos finos de marquetería y parquetería es un proceso que requiere mucho trabajo. Tradicionalmente llevada a cabo por carpinteros experimentados y altamente cualificados, las obras de marquetería y parquetería suelen tener detalles maravillosos, los mejores de los cuales son obras de arte muy apreciadas por derecho propio.
La marquetería se describe a menudo como “pintura en madera” y los cuadros pueden representar desde naturalezas muertas hasta composiciones figuradas. Dada la naturaleza intrincada y no uniforme de las obras de marquetería, éstas se utilizan con mayor frecuencia en obras más pequeñas o como punto focal dentro de una composición general más grande.
Patrones de diseño de incrustación
La técnica de la intarsia consiste en incrustar secciones de madera (a veces con marfil, hueso o nácar en contraste) dentro de la matriz de madera maciza de suelos y paredes o de tableros de mesa y otros muebles; por el contrario, la marquetería ensambla un dibujo a partir de chapas pegadas a la carcasa. La palabra intarsia puede derivar del latín interserere (insertar).
Cuando Egipto cayó bajo el dominio árabe en el siglo VII, las artes autóctonas de la intarsia y la taracea en madera, que se prestaban a decoraciones no representativas y a patrones de alicatado, se extendieron por todo el Magreb[1] La técnica de la intarsia ya se había perfeccionado en el norte de África islámico antes de ser introducida en la Europa cristiana a través de Sicilia y Andalucía. El arte se desarrolló aún más en Siena y por los maestros sieneses de la catedral de Orvieto, donde la intarsia figurativa hizo su primera aparición, c. 1330 y continuó en el siglo XV[2] y en el norte de Italia en los siglos XV y XVI, extendiéndose a los centros alemanes e introduciéndose en Londres por los artesanos flamencos a finales del siglo XVI. Los ejemplos más elaborados de intarsia se encuentran en los armarios de esta época, que eran artículos de gran lujo y prestigio[3]. A partir de 1620, la marquetería tiende a sustituir a la intarsia en la ebanistería urbana.